EN LA MIRA CON JR

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jueves, 6 de marzo de 2014


ESTRELLA POR CORRUPTO DEBE IRSE A SU CASA

“La Corte Interamericana de Derechos Humanos pondera como derechço preferente el de la libertad de expresión sobre el derecho al honor”.

ABSOLUCION

Dentro de este contexto la Sala de Apelaciones de la Corte Superior de Justicia de Huaura al ABSOLVER al Periodista Néstor Roque Solís, de cualquier presunta responsabilidad de difamación o calumnia agravada contra el Gerente General Regional del Gobierno Regional de Lima Luis Enrique Fernández Estrella y dirigente del partido no oficializado “Triunfa Perú” quien al sentirse mancillado en su honor, ante una publicación periodística cuyo título decía “POLITICOS CORRUPTOS EN LA REGIÓN LIMA” siendo la parte más resaltante de la publicación “Está comprobado que Javier Alvarado utiliza la logística y el personal de la Región Lima para hacer recolección de firmas de su partido “Triunfa Perú”. Igual su Gerente General Fernández Estrella se debe ir para la casa por el cobro de cupos a los trabajadores de la región, que es un delito propio de los delincuentes comunes, de los marcas, con la diferencia que Fernández Estrella es un CORRUPTO DE SACO Y CORBATA FINA”. Al quedar demostrado que ninguna de las imputaciones del periodista fueran falsas, la interrogante, es: ¿Quién es el irresponsable?

CONVICCIONES

A estas alturas el Gerente General Regional del Gobierno Regional de Lima Luis Enrique Fernández Estrella, debe estarse lamentando de haber denunciado al periodista, porque ahora todas sus imputaciones son evidentes indicios de ilícitos penales que se han vertido contra él. Quedan suficientes elementos de convicción de un  aprovechamiento de su cargo para obligar y cobrar “cupos” que son un porcentaje de los honorarios de trabajo, que son depositados en su cuenta bancaria personal según el cargo que desempeñan los funcionarios, empleados y servidores del Gobierno Regional de Lima, quienes para asegurar sus puestos de trabajo se ven obligados a convertirse en miembros de un partido inexistente.

JUICIO

 En el proceso judicial ha quedado establecido que el Partido “Triunfa Perú” no existe, por tanto la cuenta bancaria que pretendió Estrella simularla como partidaria no existe, es personal. Por tanto los “cupos” depositados en ella son ilícitos, porque de acuerdo a la ley de partidos exige que la economía de una organización política debe estar resguardado por el tesorero, hecho que Fernández Estrella no demostró ser ante el tribunal judicial. Lo que queda por establecer, es si los depositantes de los ilícitos “cupos” son funcionarios, empleados y servidores del Gobierno Regional de Lima, pero existen los informes de  Doris Ríos ex servidora del Gobierno Regional, quien elaboraba los reportes de los ingresos mensuales, donde registraba los montos que estaban obligados a depositar por cargo que desempeñaban en el Gobierno Regional de Lima.

COLECTIVO

La actual gestión regional carga con otro antecedente similar a la que se ha judicializado, como son las denuncias públicas del “Colectivo de Mujeres Maltratadas por Javier Alvarado” que fueron servidoras del Gobierno Regional de Lima, que aparte de obligatoriamente depositar sus “cupos” a la cuenta bancaria. Las utilizaron haciendo uso de los recursos regionales para recolectar firmas para oficializar el partido “Triunfa Perú” y luego  fueron despedidas sin devolverles sus  depósitos.  

CORRUPTO

Nadie, por ahora dice que los cupos sean para beneficio personal de Estrella aunque no rinde cuentas, pero en el contexto de la transparencia internacional dice: “Que la CORRUPCION es el mal uso del poder encomendado para beneficio privado desde ESA SECCION JURIDICA, Luis Enrique Fernández Estrella es un CORRUPTO”. Argumento no cuestionada por el Juez, ni por la defensa legal de Estrella, ni por la Sala de Apelaciones de la Corte Superior de Justicia. Por tanto, como dijera el periodista Néstor Roque Solís: “El Gerente General Regional Luis Enrique Fernández Estrella debe irse a su casa porque es un CORRUPTO con saco y corbata fina”. Salvo mejor parecer.    

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