Nuevamente la población de la
Región Lima, acudirán a las urnas el 7 de diciembre en la segunda vuelta de las
elecciones regionales en la que se elegirá es probable al último Presidente del
Gobierno Regional de Lima. Porque de acuerdo a la ley que se encuentra
pendiente de su aprobación en el
Congreso de la República cualquiera de los dos candidatos que protagonizan la
segunda vuelta y gane no podría ser reelegido para el periodo inmediato a la
que fueron elegidos. Y la denominación del cargo cambiaría por el de Gobernador
Regional, en consecuencia será Nelson Chui Mejía o Andrés Tello el último
Presidente del Gobierno Regional de Lima (Periodo 2015- 2018) que registrará la
Historia de la Región Lima.
ANTECEDENTES
En la historia electoral la
segunda vuelta regional, en el caso de que ninguno de los candidatos alcanzara
el 30% de votos válidos en la primera vuelta, fue establecida luego de que en
dos procesos electorales, los de los años 2002 y 2006, se constató la elección
de presidentes regionales con escasos porcentajes, en algunos casos por debajo
del 20% de votos. Fue en el año 2010, la primera vez que fue usada esta
modalidad, con la que 10 regiones eligieron a sus presidentes en una segunda
votación. La idea básica de la segunda vuelta es la de superar la fragmentación
y permitir la agregación de corrientes por la vía de acuerdos, y de ese modo
construir mayorías políticas que acompañen el ejercicio de una responsabilidad
crucial en los territorios de cada región.
INEDITA
En este caso, la campaña del 2014 en segunda
vuelta tiene elementos que la convierten en inédita. El primero es el aspecto
institucional, es decir, el proceso de descentralización en su conjunto. La
elección implica que se realiza en un momento dramático, la posibilidad de
dejar atrás una cuestionada administración marcada por el signo de la
corrupción y un grave deterioro de la gestión pública que se puede dejar de
remarcar. Asistiremos a esta segunda vuelta con presidentes regionales que
purgan prisión preventiva, otros prófugos, y vacados por el JNE luego de ser
condenados por delitos dolosos, y otros
investigados y procesados por graves irregularidades.
FUTURO
Un segundo elemento desafiante de
las elecciones en segunda vuelta es la posibilidad del gobierno regional de
construir una administración eficaz más allá de lo demostrado, es decir, de una
creciente capacidad de gastos sin farsas, o embustes para solo simular el
primer lugar y ser aplaudido por la platea. Es necesario, la ejecución de
políticas públicas que no se queden en obras, que se ponga sobre la mesa
agendas proactivas que permitan alcanzar éxitos en aspectos claves como la
educación, la articulación urbano-rural y la integración regional. La Región
Lima es un territorio de desorden gubernamental, con alta tasa de rotación de
funcionarios y de desencuentro provincial/regional, que han generado procesos
críticos en la ejecución de planes y políticas de gobiernos consecutivos que
duran ya varios años y que no permiten el avance, y el desarrollo regional en
su conjunto con obras de envergadura.
PROPUESTAS
A la luz de los resultados de las
Elecciones Regionales y Municipales 2014 la población regional de Lima, los dos
candidatos de la segunda vuelta tienen que tener claro el mensaje de la
población regional expresado en las ánforas, que a pesar de ser las dos
organizaciones políticas más cuestionadas en la historia de la administración
del Gobierno Regional de Lima, sin embargo les otorga la última oportunidad de
tomar nuevamente cualquiera de los dos las riendas de la administración
regional de Lima, a la que alguna vez llegaron prometiendo honestidad,
transparencia, capacidad, eficiencia y operatividad para la gestión que se les
encomendaba e hicieron todo lo contrario. 2015- 2018 será el mejor período para
su enmienda, que así lo provea Dios.
DESAPARICIÓN
Una vez más las promesas
incumplidas y los actos de corrupción que se hicieron una característica en el
pasado, y en los trajinados políticos
han forzado para que las preferencias electorales viren hacia los movimientos
políticos independientes quienes han emergido como alternativas electorales,
lográndose posesionar en el escenario electoral regional, desplazando y desapareciendo a los partidos
políticos tradicionales. Quienes ahora promueven anteproyectos de leyes para
que sean los únicos que prevalezcan en la vida política del país.
OPORTUNIDAD
En resumen, la segunda vuelta en
la Región Lima, debe ser vista como un resultado crítico y al mismo tiempo como
una oportunidad para saltos de calidad que deben dar cualquiera de los dos
movimientos políticos que llegue al Gobierno Regional de Lima. En estos casos
los electores tienen la palabra; tienen ante sí alternativas claramente
diferenciadas que ya se pudieron advertir en la primera vuelta, las que en
segunda vuelta antes que ataques inservibles deben ofrecer propuestas, y se les
debe exigir transparencia y compromiso de cara a los comicios del 7 de
diciembre.
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